Cómo evitar los errores más comunes
Muchas veces los inversores pierden de vista los aspectos más importantes para poder invertir exitosamente sus ahorros. A menudo, se preguntan ¿cómo hacer para ganar dinero? Sin embargo, un interrogante tanto o más importante sería cómo evitar las pérdidas. Por simples cuestiones matemáticas, este es un tema que puede resultar de mayor importancia que el anterior.
“Regla número uno: nunca perder dinero
Regla número dos: nunca olvidar la regla número uno”
Warren Buffett
Muchos inversores se sorprenden al tomar conciencia de que evitar las pérdidas es tanto o más importante que generar ganancias, a la hora de calcular el rendimiento total de un portafolio a largo plazo. Por ejemplo, si un inversor sufre una caída del 20% de su capital, esto implica que para recuperar el monto inicial de su patrimonio deberá generar una ganancia del 25%, es decir, mayor a la pérdida asumida.
Esto se debe a que una vez que eso ocurre, el monto del capital colocado durante el período siguiente será menor, de tal forma que se precisará de un rendimiento porcentualmente mayor para recupera lo perdido.
Por supuesto que limitar al máximo posible esta clase de percances es, además, un objetivo muy deseable desde una perspectiva más amplia que la de los simples números.
Las inversiones que terminan achicando el capital tienen un efecto psicológico muy negativo. No es lo mismo contar con un retorno positivo menor al esperado que tener uno directamente en rojo. No son pocos los casos en los que ocurre que, por haber sufrido pérdidas, deciden que el mundo de las inversiones es demasiado difícil desde el punto de vista emocional, y cometen el error de abandonar su actividad como inversores.
Por eso es importante conocer algunos consejos para intentar tomar decisiones de inversión de la manera más razonable posible, de forma de limitar al máximo las pérdidas excesivas.
Hacer un plan: dedicarse a analizar inversiones sin tener una idea clara de la tolerancia al riesgo que puede asumir y sin cuantificar sus objetivos de retorno y demás necesidades es uno de los principales errores que cometen los inversores principiantes.
Antes de decidir si una inversión es o no adecuada es necesario tener una idea clara de en qué medida sus características se ajustan a las necesidades y objetivos de cada uno. De tal manera, podrá asumir solamente los riesgos que esté dispuestos a correr.
Ejecutar su plan: armar un organigrama detallado e inteligente es sólo el paso inicial de una administración de activos eficientes. Muchos inversores cometen el error de alejarse del programa establecido ante la tentación de recomendaciones de inversión que parecen más atractivas.
Las inversiones con mayor potencial de retorno implican, a menudo, un mayor riesgo. Obviamente, no hay nada malo, intrínsecamente, en aumentar el perfil de riesgo y retorno de una cartera, pero este proceso debe realizarse siempre dentro del marco del plan de inversiones del individuo.
Controlar los costos: uno de los errores más comunes de los inversores, tanto profesionales como principiantes, es dejar de lado las implicancias de los costos en determinadas estrategias de inversión. Las implicancias de las comisiones, impuestos y demás pueden ser de tremenda importancia con el correr de los años. Mantener a raya los costos es un principio fundamental para administrar eficientemente sus inversiones
Fuente: InversorGlobal - 17/02/09
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